COPARMEX emitió comunicado fijando su postura y advirtiendo de riesgo de encarecimiento de productos, empleos, inversiones y estabilidad.
- Afecta la competitividad de las empresas generando costos adicionales que pueden traducirse en pérdidas de empleos y menor poder adquisitivo de las familias.
- Genera incertidumbre, afecta al comercio regional y compromete la integración productiva que ha permitido el crecimiento compartido.
- Afectará tanto a la economía estadounidense como mexicana.
- Las exportaciones de automóviles, autopartes, computadoras, electrodomésticos y productos agrícolas sufrirán serias afectaciones, lo que podría traducirse en una severa desaceleración económica en un contexto en que nuestra economía mostraba signos de debilidad.
- Encarecimiento de productos perjudicará a consumidores y empresas en ambos lados de la Frontera. En México el tipo de cambio podría verse presionado generando volatilidad financiera y obstaculizando el crecimiento.
- Los Bancos Centrales enfrentará dificultades para reducir tasas de interés prolongado en un entorno restrictivo para la inversión y el comercio.
- El Gobierno de México debe utilizar los mecanismos del T-MEC para impugnar estas medidas y emprender un esfuerzo diplomático que defienda los intereses nacionales.
- Más allá de esto es urgente y necesaria una estrategia integral que fortalezca nuestra economía.
- Solo con un mercado interno sólido, certeza jurídica, seguridad y un suministro energético confiable podremos atraer inversión, generar empleo y consolidar México como un socio estratégico en la región.
- El Gobierno de México junto con el Sector Privado deben definir estrategias y soluciones a estos desafíos que ponen en riesgo a los mexicanos.
- Los aranceles afectan la integración económica y no solucionan los retos compartidos entre ambos países como la seguridad y la migración





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