VIERNES DE VEJENTUD. Estar al día
Por Pedro F. Rivas Gutiérrez
¡Qué difícil es estar al día hoy en día!
Antes era de lo más sencillo, bastaba con leer los dos únicos periódicos diarios que circulaban en mi ciudad para enterarme de lo que había sucedido ayer. Luego ibas al café o a la cantina y te enterabas de lo sucedido hoy mismo.
De los parientes que habían emigrado a otros lares te enterabas por carta, entre cinco y quince días después de ocurrido lo que te contaban. Eran más rápidos los telegramas, pero los económicos solo permitían diez palabras. El rey de la celeridad era el teléfono, pero las largas distancias eran muy costosas.
—Oye escribidor, si antes estabas enterado de lo de ayer o lo de hace una semana y hoy en día te enteras en segundos, ¿cómo es que dices que es difícil estar al día hoy en día?
Bueno, pues porque si bien es cierto que hay múltiples maneras de informarte minuto a minuto, también se acumula tal cantidad de información que es prácticamente imposible asimilarla. Cuando sabías mucho de poco, había más posibilidades de estar en lo cierto.
Ahora que sabes poco de mucho, no hay la seguridad de que ese poco sea verdad. Además, es poco probable que tengas tiempo de ver, oír o leer la ingente cantidad de información que te llega, a menos que solo te dediques a eso todo el día y gran parte de la noche. Y ni así, porque se ha centuplicado también la cantidad de información falsa que le pasan a tu pobre y atormentado cerebro.
Acabas de ver un video recomendando que solo desayunes granola con yogurt porque el huevo te atesta de colesterol, cuando te llega un mensaje alabando las bondades de la proteína que contienen la yema y la clara en conjunto.
En la primera nota de la mañana se acusa a los israelíes de genocidio y un minuto después se desmenuzan las injustas agresiones de que ha sido objeto el pueblo judío, que solo se defiende. Te alarmó y reenviaste a tus amigos el anuncio de un huracán implacable y alguien te contesta haciéndote ver que esa noticia es de hace tres años.
Te angustia que no alcance la quincena para comprar con rebaja los últimos remedios milagrosos para tu enfermedad, cualquiera que sea, sirven para todas. Te mata la duda de si debes ahorrar o no para reservar un pasaje a Marte, porque de un momento a otro se acaba el mundo.
En pocas horas mueren artistas, políticos y otros superhéroes, y en los siguientes minutos se desmiente la noticia. Todo eso sin contar con el pendiente de reenviar los consejos para educar a los hijos, tener un matrimonio perfecto o una vejez digna, así como también las oraciones cuya omisión te traerá la condenación eterna.
¿Eso es estar al día? Prefiero el chisme de café o de cantina, es más seguro y saludable.
PFRG






y luego